Soy Elisenda Casals madre de dos hijos veinteañeros. Me considero una persona muy organizada y me gusta ponerme metas en la vida. Cuando nacieron mis hijos pensé que debían llegar a ser personas autónomas, independientes y sobre todo felices.
En concreto para su educación me planteé elegir un buen colegio, actividades extra-escolares, deporte, colonias de verano…, en función de sus capacidades y respetando sus preferencias. Mi frase para ellos era ¨tenéis que llenar la mochila vital con conocimientos y muchas experiencias¨ ahora añadiría y ¨ buenos contactos¨.
En el ámbito de los idiomas dudé entre clases extra-escolares, academia o colonias y al final tomé la decisión que el tiempo me ha demostrado acertada: enviarlos un mes en verano a un país de habla inglesa. Con esta decisión mis hijos pudieron integrarse en una familia extranjera captando sus valores culturales, aprendieron inglés, disfrutaron del verano e hicieron buenos contactos.
Ahora mis hijos licenciados universitarios son jóvenes preparados que se defienden en un mundo laboral que les va poniendo a prueba.
En este momento estoy satisfecha del camino elegido y me sorprende cada día ver cómo mis hijos han aprovechado su formación y cómo siguen llenando su ¨mochila vital¨.